lunes, 16 de diciembre de 2024

 EL CAMINO DEL SURESTE

COMO ALTERNATIVA A LA MASIFICACIÓN

Llevamos un año jacobeo en el que se empiezan a encender las alarmas con la masificación de algunas rutas, sobre todo durante los meses comprendidos entre comienzos de la primavera y bien avanzado el otoño. Resulta, que según los datos aportados por la oficina de acogida al peregrino en Santiago de Compostela, el número de peregrinos que han solicitado la Compostela han ido batiendo record mes tras mes llegando ya en septiembre a superar el total anual de 2023. 


Está situación de superación constante de caminantes de está transformando en cierta preocupación entre muchos de los vecinos de las rutas más frecuentadas, que se sienten a menudo invadidos por esa corriente de caminantes (que al fin y al cabo también se les debe considerar peregrinos) que principalmente transitan por las vías jacobeas buscando un turismo barato y muchas de las veces pasar unos días de asueto y aventura sin que hayan entendido muy bien los valores tradicionales que mueven a otra buena parte de los que se dirigen a Santiago, aunque repito tienen derecho y libertad para así tomarlo y sentirlo. Esos vecinos a los que me refiero ya no soportan la manera de comportarse de ciertos grupos de peregrinos bullangueros que alteran el vivir sosegado de estos lugareños que llevan muchísimos años viendo pasar peregrinos siendo respetuosos con ellos mismos y sus bienes, sus horarios y costumbres.





De ahí que tal vez sea necesario presentar otras rutas jacobeas como alternativa a las masificadas. Una de ellas bien podría ser el Camino del Sureste. Sabido es que esta ruta se inicia en Alicante y localidades aledañas y que tras cruzar siete provincias, Alicante, Albacete, Madrid, Toledo, Ávila, Valladolid y Zamora, muere en Benavente de donde parten dos alternativas: la que se dirige hasta Astorga (Camino Francés) y el Camino Sanabrés que lleva hasta la Ciudad Santa a un número de peregrinos muy adecuado para los que huyen de las aglomeraciones.



El Camino de Sureste ofrece unas posibilidades que tal vez sean desconocidas para muchos pero que de tenerlas presentes podrían  abrir las apetencias de peregrinar por él. Es verdad que se trata de una ruta con muchos km. pero que se hace atractiva por la variedad de parajes y paisajes tan diferentes que se van alternando a medida que se avanza hacia Santiago. Además, es una ruta que cumple perfectamente con lo más deseado y básico para los peregrinos, es decir, que se encuentra perfectamente señalizada de forma clara  y determinante para evitar posibles pérdidas; los albergues y  puntos de acogida se encuentran ubicados en poblaciones situadas a distancias apropiadas para las  etapas que se  realizan caminando; los servicios que ofrecen se pueden aceptar como suficientes para las necesidades de los usuarios; el trato de hospitaleros y de los vecinos, a decir de los peregrinos, es exquisito y cercano; y algo importante, en las redes sociales aparece información bastante completa y precisa para resolver las dudas que se planteen, como por ejemplo el blog del albergue de Tordesillas (https://tordesillasenelcamino.blogspot.com/).


Peregrino, ahora tienes abierta una puerta que te impulsará hacia el Camino del Sureste en el que te encontrarás sana hospitalidad, tiempo de reflexión, horas de tranquilidad, ausencia de prisas…Compruébalo sin que te lo cuenten. Acertarás con tu decisión.

viernes, 6 de diciembre de 2024

 (RÍOS Y PUENTES EN LOS CAMINOS A SANTIAGO)

 

RÍO TAMBRE - PUENTE  MACEIRA
 
El río Tambre es un río costero del noroeste de la península ibérica que discurre por Galicia. Forma parte de la vertiente atlántica y transcurre en su totalidad por la provincia de La Coruña. Tiene una longitud de 125 km. Sus principales afluentes son el Dubra y el Barcala.


A Ponte Maceira (Parroquia de Agrón) es una aldea pequeña formada por un caserío medieval con fachadas llenas de enredaderas, un magnífico puente gótico de piedra, un templo y varios varios molinos.


Ponte Maceira, también conocido como «A Ponte Vella» es un magnífico puente románico remodelado durante la Edad Media que salva el río Tambre. Los estudiosos datan el inicio de su construcción en torno al siglo XIV, fechando su reconstrucción en el siglo XVIII debido a los desperfectos provocados en las frecuentes crecidas del río.
Se trata de un puente con una calzada de 3 metros de ancho que descansa sobre cinco arcos apuntados de diferentes alturas y dimensiones, con un arco central de bóveda ojival de mayor amplitud. Dispone también de dos aliviaderos en sus extremos y varios contrafuertes encargados de soportar las crecidas de caudal.


El puente de Ponte Maceira está hecho con sillares de granito, cimentados sobre la propia roca del río. Quizás sea esta robusta construcción la que le ha permitido mantenerse en pie durante varios siglos y ser el escenario de varios acontecimientos históricos, como la batalla entre las tropas del Conde de Altamira y la Mitra compostelana.


También cuenta la leyenda de la tradición jacobea que fue aquí donde un puente se vino abajo aplastando entre sus piedras a los soldados romanos del régulo de Dugium que perseguían a los discípulos del Apóstol Santiago que habían pedido un lugar digno para enterrar a su maestro. Por eso no extraña que hoy en día Ponte Maceira sea paso clave para aquellos peregrinos que no dan por finalizado su Camino a Santiago en la capital de Galicia y continúan su periplo hacia el “finis terrae” en Fisterra.