JUAN ERASMO MOCHI CANTA “BOTAFUMEIRO”

Al hilo del post pasado relativo al botafumeiro me hago eco del último trabajo discográfico de Juan Erasmo Mochi titulado precisamente “BOTAFUMEIRO”. Lo presenta en dos versiones, una en gallego y otra en gallego y castellano.  El tema es muy pegadizo e incorpora el sonido tradicional de las gaitas. Para la versión en gallego contó con la ayuda del periodista compostelano Moncho Lemos.

Debido a la pandemia decidió componer la pieza musical para ayudar a promover este Año Santo 2.021 tan afectado por el COVID. Cuenta  que “en el Camino de Santiago está prácticamente todo cerrado y es complicado llegar a Compostela. Me sentí triste por esta situación, justo con el Año Santo a las puertas. Es un momento muy importante para Galicia y de repente todo se paró en seco. Así que decidí hacer esta canción para darle un impulso”.

Además, cuando la compuso aún no se había tomado la decisión de prorrogar el Xacobeo “y me dije tengo que hacer algo para que ese Año Santo se extienda a 2.022 y que el Camino recobre su magia. Me ha nacido de las ganas de ayudar y difundir el mensaje de que se puede seguir caminando, porque los peregrinos llegan solos a Santiago”, explica. De hecho, le gustaría que la Xunta convirtiera el tema en el himno oficial del peregrino. “Yo se la cedo de manera gratuita para que la utilicen en una gran campaña de difusión del Xacobeo”.

Aunque reconoce que solo ha hecho un tramo de 20 km por la ruta jacobea no descarta iniciarlo en un futuro desde Madrid.

Fuente: El Correo Gallego

Aquí van algunas estrofas:

As campanas de Compostela

Repelican campaneiro

Saudando os peregrinos

Que pelegrinan soñeiros.

 

Campanas de Compostela

Que repican saludando

A los nuevos peregrinos

Que a Santiago van llegando.

 Caminan los peregrinos

Con su andar más andariego

Suben al Monte do Gozo

Para divisar la seo.

 

Al llegar el Año Santo

Se abrirá la Puerta Santa

Como las puertas del cielo

Para quien su gloria canta.

 

 Pórtico de la Gloria

Con sus ángeles cantando

Al Señor de las alturas

Al Señor van alabando.

 

A dónde vas romeiro

Romeiro a donde irá

Camino de Compostela

Donde pronto llegará.

 

Un repique de campanas

En la Plaza do Obradoiro

Recibe a los peregrinos

En unión del consistorio.

 IN MEMORIAM…LUIS MARÍA

Se me ha ido un entrañable amigo peregrino. Se nos ha ido Luisma, para estar con el Padre. Tras una larga enfermedad no ha podido ser. Luisma, mocetón fuerte y aguerrido no ha podido con el enemigo que le ha tenido amordazado durante tanto tiempo impidiéndole caminar por esos senderos que se dirigen hacia Compostela. Ilusionado con el Camino (a veces me preguntaba si él era un auténtico peregrino) siempre estaba dispuesto a echar una mano a cuantos lo necesitaban. Tras su aparente inocencia se escondía un compañero con un corazón pleno de ilusiones y de vida. Cuando me lo encontraba por la calle Santa María, muy a menudo, la conversación se centraba habitualmente en “cosas del Camino” pues era un apasionado por conocerlas.

Ahora nos ha dejado para dirigirse por la ruta que lleva directamente al cielo. Tras la estela marcada por las flechas amarillas se ha encaminado definitivamente a la meta final de su camino. Seguro que su mochila la cargó con todo lo bueno que se encontró en su caminar terrenal para poder  repartirlo entre tantos peregrinos que anteriormente  transitaron  por la misma  sirga jacobea que él acaba de tomar y en especial con sus compañeros José Luis, Marcelo y Jose (e.p.d.n)

Amigo Luisma, te deseo un eterno descanso que te haga olvidar tu largo padecimiento. Que en tu nueva estancia, seguro que rodeado de estrellas, no te detengas en tu caminar, eso que tanto te gustaba en tu tierra de Villalar. Descansa en paz. Y te envío este mensaje allá donde estés…fuiste un PEREGRINO DE LOS PIES A LA CABEZA, un auténtico peregrino.

 EL BOTAFUMEIRO

 Uno de los elementos más característicos de los que está dotada la catedral de Santiago es su famoso botafumeiro (esparcidor de humo), un gigantesco incensario que, colgado del techo de la cúpula central de la catedral desde donde cuelga por un sistema de poleas, se balancea sobre las cabezas de los feligreses impregnando el ambiente del olor a incienso o substancias aromáticas quemadas en su interior. 

Su origen se sitúa en 1554. Fue construido gracias a una ofrenda del rey Luis XI de Francia. El original estaba elaborado en plata y fue robado por las tropas francesas en 1809 durante la Guerra de la Independencia. El actual botafumeiro fue fabricado por el orfebre Losada en 1851. Su origen se debe a la necesidad de crear un elemento que permitiese purificar el aire dentro de la iglesia, enrarecido por las grandes multitudes de peregrinos que allí se concentraban. Esta parece la explicación más plausible aunque hay quien defiende que su función original fue únicamente la de dar solemnidad a los actos litúrgicos.

El botafumeiro tiene un peso de 53 kg y mide un metro y medio. Se eleva a 20 metros de altura y puede llegar a alcanzar una velocidad de 68 kilómetros por hora.

La primera referencia documental que se tiene del Botafumeiro es una anotación en una hoja del Códice Calixtino, en el que se llama “Tutibulum Magnum”. En el trascurrir de la historia hubo varios botafumeiros; actualmente hay dos ejemplares, uno en latón que data de 1851 y es obra de José Losada, que sustituyó al robado durante la ocupación francesa y es el que se utiliza habitualmente. El segundo es una réplica en plata del anterior y fue regalado por los Alféreces Provisionales en 1971. Sólo se coloca en el crucero de la catedral cuando funciona, guardándose habitualmente en la Biblioteca Capitular.

Después de casi dos años parado debido a las obras de restauración de la catedral, desde primeros del 2.021 ya se encuentra operativo. El botafumeiro sólo se pone en funcionamiento en las grandes celebraciones religiosas y todos los domingos del Año Santo:

·         El 6 de enero por la Epifanía del Señor

·         Domingo de Resurrección

·         Ascensión del Señor

·         Pentecostés

·         El 23 de mayo por el aniversario de la Batalla de Clavijo

·         El 25 de julio por la festividad de Santiago Apóstol

·         El 15 de agosto por la Asunción de Nuestra Señora

·         El 1 de noviembre por el día de Todos los Santos

·         Solemnidad de Cristo Rey

·         El 8 de diciembre por la Inmaculada Concepción

·         El 25 de diciembre por el Día de Navidad

·         El 30 de diciembre por la Translación del Santo Apóstol

Igualmente puede funcionar a petición de fieles o de grupos, solicitándolo con anterioridad en la Oficina de Acogida al peregrino y abonando el estipendio correspondiente (400-450 €), diciéndose en la misa quién hace el pago.

Para ponerlo en marcha es balanceado por ocho "tiraboleiros o tiboleiros", saltando uno de ellos, el tiboleiro mayor, sobre el incensario para detenerlo. Se dice que el humo que expide tiene propiedades terapéuticas para ciegos y tuertos, tartamudos y personas que sufren de afecciones respiratorias. Impresiona e infunde cierto temor contemplar su balanceo sobre las cabezas de los fieles, temor justificado pues se tiene noticia de que al menos en tres ocasiones el gigantesco incensario se soltó de la cadena que lo sujeta y salió volando, aunque por suerte sin causar víctimas mortales. La más célebre de estas ocasiones tuvo lugar en 1.499 en presencia de Catalina de Aragón, hija de los Reyes Católicos, que había parado en Santiago para orar ante la tumba del Apóstol antes de embarcar en La Coruña con dirección a Inglaterra para su boda con el Príncipe de Gales, saliendo despedido por la Puerta de Platerías.

El primer enlace recoge el funcionamiento del botafumeiro coincidiendo con la visita a Santiago del Papa Benedicto XVI con ocasión del Año Santo 2010:

https://www.youtube.com/watch?v=tr2vZ6WmHSw

El segundo corresponde Funcionamiento del Botafumeiro, al finalizar la Misa de Acción de Gracias por el inicio del Año Santo Compostelano 2021, el 31 de diciembre de 2020(Imágenes de TVG).

https://www.youtube.com/watch?v=_4hhL6Ih9-w

¿QUÉ TE OFRECE EL CAMINO?

En estos momentos que los Caminos a Santiago se encuentran vacíos de peregrinos (en enero del pasado año se entregaron 1.999 compostelas y este año solamente 60) puede ser  recomendable reflexionar sobre la pregunta que se presenta en el título: ¿Qué te ofrece el Camino de Santiago? Al ser tan grande el número de peregrinos que en épocas normales se dirigen hacia la tumba del Apóstol seguro que las respuestas serán muy diversas y todas válidas.

Desde el albergue de Tordesillas recogemos una muestra para que nos demos cuenta que el Camino influye en gran manera sobre todos y cada uno de los caminantes. Aquí van algunas:

- Personalmente a mi me ofrece cultura, patrimonio, paisaje, solidaridad, amistades nuevas, dosis de espiritualidad, momentos inolvidables y deporte.

-  Soledad o compañía en la medida que deseas.

- Me permite meditar, recuperar la necesidad de ordenar prioridades, desplazar lo prescindible, lo no esencial, volver a pensar en mí, en los míos, poner frente a mí los verdaderos valores, los que no quiero perder…El Camino me devuelve donde quiero estar, alejándome de donde me lleva la vorágine del día a día a lo largo del resto del año. Todo esto y paz, sosiego, alegría, satisfacción…

- A mí me ofrece relajación, la cabeza libre de pensamientos, el reloj sin mirarlo, el aire limpio y el alma muy serena.

- El Camino es como una mano abierta. Te ofrece lo que quieras coger, luego tú eliges.

- Representa Tiempo de Vida…me permite estar y disfrutar más del presente. Me da vida, gozo, paz, fortalece mi fe y me lleva a humanizarme más.

- Momentos inolvidables y desconectar del mundo real.

- Equilibrio…te olvidas de todo…eres tú y tu mochila.

- Espacio para reconciliar emociones y pensamientos.

- Ver caminos que nunca antes había pisado.

- Ser peregrino es que tu caminar te acerque más al cielo.

- Pone en movimiento corazón y alma.

- Seguir viviendo.

- El Camino da fortaleza, serenidad, conocimiento de que uno puede, saca lo que uno es.

- Deporte, naturaleza, desconexión total, amistad, cansancio, relax, diversión.

- Magia, ronquidos, ampollas, alcohol, vicio, frío, lluvia, calor…

- Sensaciones únicas.

- Oportunidad para reflexionar, de superarme a mí misma, de conocer a otras personas y mantener contacto con la naturaleza.

- Solidaridad, compañerismo, humanidad, generosidad…ser tú mismo.

- Tiempo para platicar con uno mismo y arreglar todo lo desordenado que tenemos en la cabeza, risas, llanto, excelentes amistades. El Camino ofrece muchísimo.

- El Camino le da a cada persona lo que necesita en ese justo momento para su vida. Así de fácil y así de simple.

- Sobre todo en el Camino te das cuenta que no hace falta tanto para ser feliz, con una mochila, llevando lo más necesario y caminando es suficiente para estar disfrutando de la vida como nunca.

- Las soledades que nos brinda el Camino, nos permiten hurgar en nuestro interior y llenarnos de esas preguntas inquisidoras que todos guardamos en lo más profundo de nuestro ser.

Estas son algunas de las respuestas extraídas de un foro de peregrinos. ¿Cuál es la tuya?